Después de 15 años trabajando como fotógrafo profesional en Valencia, puedo decir que nada me llena tanto como capturar la mirada de una fallera vestida con su traje tradicional. Como fotógrafo de falleras, tengo claro que la fotografía es más que una imagen, es congelar un instante donde confluyen siglos de tradición con la ilusión de quien porta ese traje con tanto orgullo. Y es que cuando disparas la cámara en ese momento preciso, sabes que estás contribuyendo a preservar nuestro patrimonio cultural.
Quizás lo más difícil de explicar es cómo intento capturar algo tan intangible como la ‘esencia fallera’. No es solo técnica, es entender que detrás de cada traje hay historias familiares, hay sacrificio, hay identidad valenciana. Cuando fotografío a una fallera, no estoy simplemente retratando a una persona con un traje bonito. Estoy documentando la continuidad de una tradición, que nos define como pueblo. Por eso me emociono tanto con mi trabajo, porque siento que contribuyo, aunque sea modestamente, a preservar nuestra cultura.
Lo noto en cada sesión: cuando una fallera cruza la puerta de mi estudio, no viene simplemente a hacerse unas fotos. Viene nerviosa, ilusionada, consciente de que esas imágenes quedarán para siempre en la historia familiar. Por eso me tomo cada sesión como un proyecto único, donde cada detalle cuenta.
Recuerdo especialmente a María, fallera mayor de su comisión, que llegó preocupada porque su traje familiar tenía más de 15 años y temía que no luciera bien en las fotos. Tras ajustar cuidadosamente la iluminación para resaltar los matices de esa seda envejecida pero preciosa, conseguimos que cada puntada contara su propia historia. Cuando vio las fotos, las lágrimas en sus ojos me confirmaron por qué amo mi trabajo.
Cada sesión de fotos, está diseñada para resaltar los detalles y la majestuosidad de tu indumentaria fallera, cuidando cada aspecto para que las imágenes sean un homenaje a la cultura valenciana.
Como fotógrafo de falleras, ofrecemos estos servicios:
Después de cientos de sesiones, puedo compartir algunos consejos que marcan la diferencia:
Tras probar innumerables técnicas y localizaciones durante estos años, he llegado a desarrollar un estilo propio que adapto según cada fallera y sus preferencias:
Mi estudio en el centro de Valencia es mi segundo hogar. Aquí, he creado un espacio donde la luz danza con las sedas y los bordados de los trajes falleros. No os voy a engañar, soy un maniático del detalle. Me lleva mi tiempo ajustar cada foco, para que la sombra de una peina resalte sin oscurecer el rostro, o para que el brillo de un pendiente tradicional capture exactamente la luz que merece. Me gusta contar a mis clientes que para estas sesiones me inspiré en Sorolla y su manejo magistral de la luz mediterránea. No pretendo compararme con el maestro, por supuesto, pero su influencia me guía en cada sesión, buscando esa luminosidad especial que solo Valencia ofrece.
Valencia es un lienzo perfecto, le digo siempre a las falleras cuando salimos a fotografiar por la ciudad. El año pasado, una sesión al amanecer con Ana junto a las Torres de Serranos, creó una de las imágenes más emotivas de mi carrera. La piedra centenaria dialogando con los hilos dorados de su traje, mientras la primera luz acariciaba su rostro… momentos así justifican los madrugones y el trasiego de equipos por las calles aún desiertas. Y qué decir de los pasacalles, donde el movimiento, la música y la emoción se funden. Ahí no diriges, cazas instantes. Es fotografía pura, casi deportiva, donde la técnica se pone al servicio del sentimiento.
Os contaré algo que me ocurrió al principio de mi carrera: una familia me contrató para fotografiar a su hija como fallera, y yo, confiado en mi técnica general, pensé que sería sencillo. Fue un desastre. No supe dirigir las poses, no entendía la importancia de ciertos ángulos para mostrar correctamente el traje, ni conocía la tradición lo suficiente. Aquella experiencia me marcó y me hizo sumergirme completamente en el mundo de la indumentaria valenciana.
Ahora, después de años de especialización:
Si has llegado hasta aquí, probablemente compartas mi pasión por nuestra tradición fallera. Me encantaría conocerte y hablar sobre tu proyecto fotográfico, sea para ti como fallera individual, para tu familia o para toda tu comisión. Quiero escuchar tus necesidades y ofrecerte un presupuesto personalizado que se ajuste exactamente a lo que buscas.
Te invito a contactarme para tomar un café y hablar sobre cómo podemos crear juntos imágenes que no solo capturen un momento, sino toda la emoción y el orgullo de formar parte de esta tradición que tanto amamos.
Si optas por una sesión al aire libre, te recomendamos algunos escenarios que complementan a la perfección tu indumentaria: